De los Jesuitas al Sacromonte, penitencia de payos y gitanos
Escrito por JORGE MARTÍNEZ GRANADA
Jueves, 09 de Abril de 2009 08:03
Las cinco cofradías de ayer se presentaron de forma impecable en las calles granadinas. No hacía falta moverse mucho del centro de la ciudad para contemplarlas y acompañarlas en sus respectiva estaciones penitenciales pero sí que había que estar en el camino del Sacromonte para dejarse llevar por la participación de propios y foráneos que estuvieron de madrugada envueltos por el humo de las hogueras y el calor humano que abrumaba las cuestas sacromontanas y que se recreaba en un ambiente popular, entre saetas y bailes de los gitanos a su Cristo del Consuelo. Aguantó con ganas la banda de Jesús del Gran Poder acompañando al titular de la hermandad mezclando la música procesional con la expresión de este barrio cuando ve pasar al Crucificado de cuatro clavos.
El relato de la jornada de ayer nos vuelve a llevar al barrio del Realejo para contemplar a la cofradía del Rosario, popular y querida por los granadinos que bien supieron arroparla con su calor y al de San Matías, tan próximo al Realejo que se confunde con él, para ver a las hermandades de las Penas y de Jesús Nazareno. El punto final del día se puso en la plaza de la Universidad con el cortejo de estudiantes que dan culto al Señor de la Meditación.
Si nos dejamos llevar por la bulla del Miércoles Santo, nos deja frente al Sagrado Corazón de Jesús, en la Gran Vía, para envolvernos desde primeras horas de la tarde en el ambiente festivo que para los gitanos supone la presencia de su Cristo en nuestras calles. Aplausos nada más abrirse las puertas del templo jesuita y un cortejo morado, oro y rojo precedía a la cofradía camino de la Catedral y del Sacromonte. En la calle aguardaba la banda de cornetas y tambores del Gran Poder con sus partituras dispuestas para dejarse llevar hasta Valparaíso. Al paso de palio lo esperaba la banda de música de Churriana de la Vega. Un espeso calvario de iris morado alfombraba el paso del Cristo de los Gitanos. ‘Pureza’ fue la primera marcha que interpretaron y después ‘¡Ahí queó¡’ en la Gran Vía. Representaciones del Colegio de Abogados, Antiguos alumnos sacromontanos y diversos hermanos mayores honorarios.
Pétalos y fiesta
Francisco Rodríguez mandó la rodilla en tierra mientras se silenciaba la Gran Vía. Pero nada más poner los primeros hachones del paso en la calle, iluminados por el sol que relucía sobre el canastillo dorado del paso, los vítores y aplausos rompían el silencio emocionado y los pétalos de flores caían para el Señor de los Gitanos. La música, los aplausos, las lágrimas en los ojos de gitanos que habían bajado a ver a su Cristo y la emoción contagiosa de muchos que no pudieron contener en ese momento. Eran las seis menos cuarto de la tarde y la fiesta gitana estaba servida en un relato que duraría aún más de once horas hasta llegar a la Abadía del Sacro monte.
Llevaba la Virgen un puñal regalo del cofrade fallecido en agosto pasado, José Valenzuela, tan querido en la cofradía y deshermano mayor de la misma, además de honorario, junto con una medalla que el recordado Jesús Roldán, abad sacromontano también fallecido, ofreció a la titular mariana de esta hermandad. Un delicado adorno de flor, muy vistoso, lucía ayer este palio con orfebrería en color cobre. Se trata de rosas en color rosa pálido que encajaba muy bien además de que Fernando González presentó vestida a la Virgen de manera muy despejada y abierta que permitía ver en todo su esplendor a esta original Dolorosa granadina.
Después, la Madre Gitana ya era presa de los piropos con el brazo alzado que los clavaba sobre el rostro de la Virgen del Sacromonte. Las saetas fueron compañeras de estos pasos, junto con el arte y la gracia simpar de los vecinos sacromontanos que no dejaron de alabar al Cristo del Consuelo y a la Virgen del Sacromonte en todo momento. Compañía de fieles, devotos, turistas, curiosos y amantes de este ritual mezcla de lo cofrade y folclórico, estampa típica y universal de la Semana Santa de Granada.
Por calle San Matías
El ambiente popular en las proximidades de la cofradía de los Gitanos se fue apaciguando conforme entraba el cortejo en la Carrera Oficial. Por calle San Matías la hermandad estaba desplegada e interesaba cumplir el horario para dejar expedito el camino a la cofradía del Señor de la Paciencia, aunque pasaron con diez minutos de retraso. A las siete y veinte de la tarde no cabía nadie más en este pequeño rellano de escaleras y calle para ver salir a la cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Paciencia y María Santísima de las Penas. La comitiva morada y blanca de esta hermandad tenía que caminar en sus primeros pasos con lentitud pues iba precedida por la cofradía del Consuelo que iniciaba su camino por la Tribuna de la plaza del Carmen. El paso primero de la hermandad, Jesús de la Paciencia atado a la columna, era mandado por Gerardo Sabador Manzano con la ayuda de José Ángel Sabador y de Domingo Navarro. Veteranía bajo las trabajaderas para procesionar la talla prodigiosa de uno de los mejores escultores del barroco, Pablo de Rojas. Calvario de clavel rojo a sus plantas y una más que consolidada relación con la agrupación musical de la Virgen de la Estrella, todo un clásico en esta hermandad de penitencia. Interpretó ‘La Saeta’ cuando el paso estaba en el interior del templo.
La cofradía de San Matías es una hermandad asentada en la tradición y el martillo que manda Jorge Mario Martín Guerrero, tiene el sello de los primeros pasos de la costalería granadina con su marchamo inconfundible en las ‘levantás’ y en el andar de la Dolorosa de San Matías. También está el manto de la Virgen casi sellado con la fuerza de la tradición a la banda ‘Felipe Moreno’, de Cúllar Vega, que dirige Alberto de Haro. Son ya tantos años unidas ambas formaciones a esta cofradía que sería impensable que un Miércoles Santo faltaran a esta cita en San Matías.
Dificultosa salida tanto desde el templo como de los escalones que la cuadrilla ha de salvar para bajar a la calle San Matías. Gladiolos blancos y orquídeas para el paso de palio de la Virgen de las Penas en un conjunto armonioso de orfebrería y bordados que llevan el marchamo de una de la más prestigiosas firmas andaluzas, la de Fernández y Enríquez, de Brenes (Sevilla). Lazo negro en el llamador del paso en recuerdo del maestro de capataces Antonio Sánchez Osuna, como viene siendo habitual en el resto de cofradías granadinas.La hermandad ha restaurado este año el guión del paso de Cristo, con la pintura de Antonio Alonso, acometida por él propio autor de la obra, veintinueve años después de su realización. También se han plateado las jarras y violeteras del paso de palio en el taller del orfebre Aragón y Pineda, de Motril. En el cortejo acompañaba la edil Marifrán Carazo, de Turismo, en representación del Ayuntamiento granadino como hermano mayor honorario que es de esta cofradía y el general Nadal, del Madoc.
Rosario dominico
Solo había que moverse unos metros para llegar a la plaza de Santo Domingo, pero sin llegar a despedirse del todo de la calle San Matías a la que regresaremos para ver la salida de Jesús Nazareno que a las nueve y diez de la noche estaba anunciada. Las ocho menos cuarto de la tarde daban y en el Realejo había un mar de cabezas que presagiaban la brisa marinera del palio de la Virgen del Rosario. Puertas abiertas, cruz de guía presentada y el comienzo de una estación de penitencia que llevaba un especial aroma a tristeza en la noche del Miércoles Santo.
La ausencia inesperada de un hermano, Ignacio Roldán, que había estado preparándola con su normal preocupación y trabajo hasta el mismo Viernes de Dolores, fallecido de manera repentina, estaba presente en el cortejo morado y blanco de la cofradía realejeña del Miércoles Santo y significado en el guión corporativo. Aún así la cofradía tenía que seguir y uno a uno se anduvieron los pasos hasta la Catedral con el recuerdo del hermano ausente.
La Virgen llevaba un rosario de cuentas negras en su mano como recuerdo a él. Una a una las marchas desgranadas de la banda de cornetas y tambores de la hermandad, dirigida por José Miguel López Zamorano, para el Señor de las Tres Caídas. También en recuerdo de este hermano sonaron los ‘Toques de Oración’ nada más salir el Nazareno de las Tres Caídas, interpretado por su banda de cornetas y tambores que ayer vestían de uniforme blanco.
Solemnidad y elegancia en el andar costalero de la cuadrilla que mandaba Miguel García Almagro nada más hacerse presente en la plaza de Santo Domingo. El sobrenombre de la ‘cuadrilla del arte’ no es vano en esta hermandad. Andar clásico, recreándose y bordando filigranas de una coreografía estudiada y medida para este misterio dorado del Realejo. El clavel rojo presidía este misterio realejeño, precedido por un amplio cortejo de nazarenos y seguido por penitentes con cruz, y precedido por un gran número de camareras vistiendo la clásica mantilla.
En el paso de palio Curro Jiménez-Herrera puso el toque de una herencia marinera en las bambalinas del paso de palio y vestida la Virgen del Rosario por Francisco Garví, quien le sacó a la talla de Miguel Zúñiga toda su belleza natural. La salve marinera fue una constante a la salida del palio de la Virgen del Rosario, al igual que como es tradición, en la plaza de las Pasiegas y en el regreso de la cofradía. La música la ponía la banda de la Soledad de Cantillana, de Sevilla. Momentos emotivos que cumplieron con la costumbre de venerar a la Virgen de Lepanto en sus Misterios Dolorosos. Calas blancas, fresias y rosas blancas adornaban el palio con exquisito gusto, que ofreció una preciosa ‘chicotá’ con la marcha ‘La Madrugá’ en su salida del templo.
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Comentarios
#6 rafael aranda cortes 2009-04-0916:26:36 hola jienense yo soy costalero de la virgen del sacromonte y a mi tampoco me gusto nada lo del megafono ni los cantes flamencos puesto que estoy contigo en eso de que no tiene nada que ver con la semana santa o pasion cofrade pero una cosa en la que no estoy deacuerdo es en que dejes de venir a vernos o enseñarle nuestro esfuerzo y nuestra pasion trabajando debajo de la virgen a tus paisanos por culpa de gente ajena a la cofradia puesto que nosotros no tenemos control sobre ellos que yo creo que dentro de lo que cabe mantuvimos seriedad y lo hicimos bastante bien teniendo en cuenta que ya llevabamos encima carrera oficial entera cuesta del chapiz y mitad del camino del monte un saludo espero que no dejes de vernos porque en lo que se refiere a la cofradia yo creo que no tubimos ningun fallo respecto a la buya e intentamos lucir a la gitana lo maximo que nuestros cuerpos aguantaron un saludo
#5 Chavorrillo 2009-04-0914:08:48 Durante el año se me llena la boca de mi Cristo y Virgen Gitana de Granada. Estimados granain@s: no volveré a ir ni llevar a nadie a verles, mientras alguien no confirme que no volverá a ocurrir otro espectáculo bochornoso como el de ayer. Dejaré de ser forofo de este evento del q presumía como aficionado algo creyente, gitano, etc… Menos mal que la celebración del día de los Romà fue de alabar y a la que repetiré. Pero que alguien ponga remedio a lo ocurrido. Creo qe l@s gitan@s sabemos dar otro tipo de ejemplos y no ese "del pique" (que es lo que todo el mundo entendió). Por l@s que nos esforzamos en desplazarnos para disfrutar de las tradiciones de gitan@s y pay@s, por favor que alguien ponga solución a esto y que lo haga público para otro año…porque por mi parte no paso más vergüenza como promotor del evento y por la parte gitana que me toca. Oprè Romà!! Vivan l@s gitan@s y todo lo bueno que nos caracteriza. Satipén thaj Mestipén!!!
#4 Jose 2009-04-0913:47:34 Pako me alegra que tengas por tradición venir de Jaén a ver esta emocionante procesion. Personalmente el tema de la megafonia me parecio fuera de lugar, era como una forma de resaltar por encima del resto y dejar a un lado lo tradicional, pero no dejes de venir por ese motivo, no vale la pena que por ese aspecto dejes de vivir el resto, que son únicos. Saludos
#3 Canastilla 2009-04-0913:44:09 Un año más, la Hermandad del Rosario ha dejado a Granada con la boca abierta. Así da gusto vivir la Semana Santa en Granada!!!Me voy a dar el gustazo de transmitiros un sueño: Desearía ver a la Hermandad de los Gitanos saliendo de la Abadía del Sacromonte, con un cortejo muy amplio y bien formado (como pudimos contemplar en el Rosario), acompañada por gitanos y payos, con un auténtico sentir cofrade, dejando a un lado el folklore que malbarata a nuestra Semana Santa y haciendo una Estación de Penitencia como Dios manda, concluyendo en el Sagrado Corazón de Jesús. Perdonadme todos aquellos amantes de la fiesta flamenca que se vive actualmente en el regreso de la Hermandad a la Abadía, pero eso, desde mi punto de vista, es algo ajeno al sentir de los cofrades.
#2 Pako 2009-04-0913:35:28 Soy un jiennense que hacia dos años no visitaba el Sacromonte la noche del Cristo de los Gitanos, algo que siempre me ha gustado hacer y recomendar a todos mis paisanos. Ayer sufri una gran decepción. Al llegar la comitiva al ensanche donde esta la Peña del Gallo (no se como se llama) hubo lo que en mi opinión fue una trifulca entre dos grupos de cantaores: uno de ellos los que yo siempre habia visto, cantando saetas a capela con su hoguera y vengalas; y otro grupo con megafonia, guitarras y flamenco, en la terraza de la Peña del Gallo. Alli no se escuchaba a unos ni a otros. ¿Que paso alli?. Menos mal que nadie venia con nosotros como otros años, por me hubiese dado verguenza ajena. Con lo bien que hemos hablado a todo el mundo de este momento especial y por nosotros vividos anteriormente. Igua me equivoco, pero me parecio un espectaculo lamentable el ofrecido y de momento tengo una cosa muy clara, el próximo año me quedare en mi Jaén, o eligire otro lugar nuevo por conocer.
#1 León de la Metro 2009-04-0912:52:29 Lo mejor de la noticia la galería fotográfica del Rosario… de 64 fotos, casi 60 son de la gente que había en la plaza de Santo Domingo. Está claro que era lo importante para el fotógrafo: que la plaza estaba llena…Por cierto, ¿sabía el fotógrafo que salía el Tres Caídas y la Virgen del Rosario?
Escrito por JORGE MARTÍNEZ GRANADA
Jueves, 09 de Abril de 2009 08:03
Las cinco cofradías de ayer se presentaron de forma impecable en las calles granadinas. No hacía falta moverse mucho del centro de la ciudad para contemplarlas y acompañarlas en sus respectiva estaciones penitenciales pero sí que había que estar en el camino del Sacromonte para dejarse llevar por la participación de propios y foráneos que estuvieron de madrugada envueltos por el humo de las hogueras y el calor humano que abrumaba las cuestas sacromontanas y que se recreaba en un ambiente popular, entre saetas y bailes de los gitanos a su Cristo del Consuelo. Aguantó con ganas la banda de Jesús del Gran Poder acompañando al titular de la hermandad mezclando la música procesional con la expresión de este barrio cuando ve pasar al Crucificado de cuatro clavos.
El relato de la jornada de ayer nos vuelve a llevar al barrio del Realejo para contemplar a la cofradía del Rosario, popular y querida por los granadinos que bien supieron arroparla con su calor y al de San Matías, tan próximo al Realejo que se confunde con él, para ver a las hermandades de las Penas y de Jesús Nazareno. El punto final del día se puso en la plaza de la Universidad con el cortejo de estudiantes que dan culto al Señor de la Meditación.
Si nos dejamos llevar por la bulla del Miércoles Santo, nos deja frente al Sagrado Corazón de Jesús, en la Gran Vía, para envolvernos desde primeras horas de la tarde en el ambiente festivo que para los gitanos supone la presencia de su Cristo en nuestras calles. Aplausos nada más abrirse las puertas del templo jesuita y un cortejo morado, oro y rojo precedía a la cofradía camino de la Catedral y del Sacromonte. En la calle aguardaba la banda de cornetas y tambores del Gran Poder con sus partituras dispuestas para dejarse llevar hasta Valparaíso. Al paso de palio lo esperaba la banda de música de Churriana de la Vega. Un espeso calvario de iris morado alfombraba el paso del Cristo de los Gitanos. ‘Pureza’ fue la primera marcha que interpretaron y después ‘¡Ahí queó¡’ en la Gran Vía. Representaciones del Colegio de Abogados, Antiguos alumnos sacromontanos y diversos hermanos mayores honorarios.
Pétalos y fiesta
Francisco Rodríguez mandó la rodilla en tierra mientras se silenciaba la Gran Vía. Pero nada más poner los primeros hachones del paso en la calle, iluminados por el sol que relucía sobre el canastillo dorado del paso, los vítores y aplausos rompían el silencio emocionado y los pétalos de flores caían para el Señor de los Gitanos. La música, los aplausos, las lágrimas en los ojos de gitanos que habían bajado a ver a su Cristo y la emoción contagiosa de muchos que no pudieron contener en ese momento. Eran las seis menos cuarto de la tarde y la fiesta gitana estaba servida en un relato que duraría aún más de once horas hasta llegar a la Abadía del Sacro monte.
Llevaba la Virgen un puñal regalo del cofrade fallecido en agosto pasado, José Valenzuela, tan querido en la cofradía y deshermano mayor de la misma, además de honorario, junto con una medalla que el recordado Jesús Roldán, abad sacromontano también fallecido, ofreció a la titular mariana de esta hermandad. Un delicado adorno de flor, muy vistoso, lucía ayer este palio con orfebrería en color cobre. Se trata de rosas en color rosa pálido que encajaba muy bien además de que Fernando González presentó vestida a la Virgen de manera muy despejada y abierta que permitía ver en todo su esplendor a esta original Dolorosa granadina.
Después, la Madre Gitana ya era presa de los piropos con el brazo alzado que los clavaba sobre el rostro de la Virgen del Sacromonte. Las saetas fueron compañeras de estos pasos, junto con el arte y la gracia simpar de los vecinos sacromontanos que no dejaron de alabar al Cristo del Consuelo y a la Virgen del Sacromonte en todo momento. Compañía de fieles, devotos, turistas, curiosos y amantes de este ritual mezcla de lo cofrade y folclórico, estampa típica y universal de la Semana Santa de Granada.
Por calle San Matías
El ambiente popular en las proximidades de la cofradía de los Gitanos se fue apaciguando conforme entraba el cortejo en la Carrera Oficial. Por calle San Matías la hermandad estaba desplegada e interesaba cumplir el horario para dejar expedito el camino a la cofradía del Señor de la Paciencia, aunque pasaron con diez minutos de retraso. A las siete y veinte de la tarde no cabía nadie más en este pequeño rellano de escaleras y calle para ver salir a la cofradía de Nuestro Padre Jesús de la Paciencia y María Santísima de las Penas. La comitiva morada y blanca de esta hermandad tenía que caminar en sus primeros pasos con lentitud pues iba precedida por la cofradía del Consuelo que iniciaba su camino por la Tribuna de la plaza del Carmen. El paso primero de la hermandad, Jesús de la Paciencia atado a la columna, era mandado por Gerardo Sabador Manzano con la ayuda de José Ángel Sabador y de Domingo Navarro. Veteranía bajo las trabajaderas para procesionar la talla prodigiosa de uno de los mejores escultores del barroco, Pablo de Rojas. Calvario de clavel rojo a sus plantas y una más que consolidada relación con la agrupación musical de la Virgen de la Estrella, todo un clásico en esta hermandad de penitencia. Interpretó ‘La Saeta’ cuando el paso estaba en el interior del templo.
La cofradía de San Matías es una hermandad asentada en la tradición y el martillo que manda Jorge Mario Martín Guerrero, tiene el sello de los primeros pasos de la costalería granadina con su marchamo inconfundible en las ‘levantás’ y en el andar de la Dolorosa de San Matías. También está el manto de la Virgen casi sellado con la fuerza de la tradición a la banda ‘Felipe Moreno’, de Cúllar Vega, que dirige Alberto de Haro. Son ya tantos años unidas ambas formaciones a esta cofradía que sería impensable que un Miércoles Santo faltaran a esta cita en San Matías.
Dificultosa salida tanto desde el templo como de los escalones que la cuadrilla ha de salvar para bajar a la calle San Matías. Gladiolos blancos y orquídeas para el paso de palio de la Virgen de las Penas en un conjunto armonioso de orfebrería y bordados que llevan el marchamo de una de la más prestigiosas firmas andaluzas, la de Fernández y Enríquez, de Brenes (Sevilla). Lazo negro en el llamador del paso en recuerdo del maestro de capataces Antonio Sánchez Osuna, como viene siendo habitual en el resto de cofradías granadinas.La hermandad ha restaurado este año el guión del paso de Cristo, con la pintura de Antonio Alonso, acometida por él propio autor de la obra, veintinueve años después de su realización. También se han plateado las jarras y violeteras del paso de palio en el taller del orfebre Aragón y Pineda, de Motril. En el cortejo acompañaba la edil Marifrán Carazo, de Turismo, en representación del Ayuntamiento granadino como hermano mayor honorario que es de esta cofradía y el general Nadal, del Madoc.
Rosario dominico
Solo había que moverse unos metros para llegar a la plaza de Santo Domingo, pero sin llegar a despedirse del todo de la calle San Matías a la que regresaremos para ver la salida de Jesús Nazareno que a las nueve y diez de la noche estaba anunciada. Las ocho menos cuarto de la tarde daban y en el Realejo había un mar de cabezas que presagiaban la brisa marinera del palio de la Virgen del Rosario. Puertas abiertas, cruz de guía presentada y el comienzo de una estación de penitencia que llevaba un especial aroma a tristeza en la noche del Miércoles Santo.
La ausencia inesperada de un hermano, Ignacio Roldán, que había estado preparándola con su normal preocupación y trabajo hasta el mismo Viernes de Dolores, fallecido de manera repentina, estaba presente en el cortejo morado y blanco de la cofradía realejeña del Miércoles Santo y significado en el guión corporativo. Aún así la cofradía tenía que seguir y uno a uno se anduvieron los pasos hasta la Catedral con el recuerdo del hermano ausente.
La Virgen llevaba un rosario de cuentas negras en su mano como recuerdo a él. Una a una las marchas desgranadas de la banda de cornetas y tambores de la hermandad, dirigida por José Miguel López Zamorano, para el Señor de las Tres Caídas. También en recuerdo de este hermano sonaron los ‘Toques de Oración’ nada más salir el Nazareno de las Tres Caídas, interpretado por su banda de cornetas y tambores que ayer vestían de uniforme blanco.
Solemnidad y elegancia en el andar costalero de la cuadrilla que mandaba Miguel García Almagro nada más hacerse presente en la plaza de Santo Domingo. El sobrenombre de la ‘cuadrilla del arte’ no es vano en esta hermandad. Andar clásico, recreándose y bordando filigranas de una coreografía estudiada y medida para este misterio dorado del Realejo. El clavel rojo presidía este misterio realejeño, precedido por un amplio cortejo de nazarenos y seguido por penitentes con cruz, y precedido por un gran número de camareras vistiendo la clásica mantilla.
En el paso de palio Curro Jiménez-Herrera puso el toque de una herencia marinera en las bambalinas del paso de palio y vestida la Virgen del Rosario por Francisco Garví, quien le sacó a la talla de Miguel Zúñiga toda su belleza natural. La salve marinera fue una constante a la salida del palio de la Virgen del Rosario, al igual que como es tradición, en la plaza de las Pasiegas y en el regreso de la cofradía. La música la ponía la banda de la Soledad de Cantillana, de Sevilla. Momentos emotivos que cumplieron con la costumbre de venerar a la Virgen de Lepanto en sus Misterios Dolorosos. Calas blancas, fresias y rosas blancas adornaban el palio con exquisito gusto, que ofreció una preciosa ‘chicotá’ con la marcha ‘La Madrugá’ en su salida del templo.
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#6 rafael aranda cortes 2009-04-0916:26:36 hola jienense yo soy costalero de la virgen del sacromonte y a mi tampoco me gusto nada lo del megafono ni los cantes flamencos puesto que estoy contigo en eso de que no tiene nada que ver con la semana santa o pasion cofrade pero una cosa en la que no estoy deacuerdo es en que dejes de venir a vernos o enseñarle nuestro esfuerzo y nuestra pasion trabajando debajo de la virgen a tus paisanos por culpa de gente ajena a la cofradia puesto que nosotros no tenemos control sobre ellos que yo creo que dentro de lo que cabe mantuvimos seriedad y lo hicimos bastante bien teniendo en cuenta que ya llevabamos encima carrera oficial entera cuesta del chapiz y mitad del camino del monte un saludo espero que no dejes de vernos porque en lo que se refiere a la cofradia yo creo que no tubimos ningun fallo respecto a la buya e intentamos lucir a la gitana lo maximo que nuestros cuerpos aguantaron un saludo
#5 Chavorrillo 2009-04-0914:08:48 Durante el año se me llena la boca de mi Cristo y Virgen Gitana de Granada. Estimados granain@s: no volveré a ir ni llevar a nadie a verles, mientras alguien no confirme que no volverá a ocurrir otro espectáculo bochornoso como el de ayer. Dejaré de ser forofo de este evento del q presumía como aficionado algo creyente, gitano, etc… Menos mal que la celebración del día de los Romà fue de alabar y a la que repetiré. Pero que alguien ponga remedio a lo ocurrido. Creo qe l@s gitan@s sabemos dar otro tipo de ejemplos y no ese "del pique" (que es lo que todo el mundo entendió). Por l@s que nos esforzamos en desplazarnos para disfrutar de las tradiciones de gitan@s y pay@s, por favor que alguien ponga solución a esto y que lo haga público para otro año…porque por mi parte no paso más vergüenza como promotor del evento y por la parte gitana que me toca. Oprè Romà!! Vivan l@s gitan@s y todo lo bueno que nos caracteriza. Satipén thaj Mestipén!!!
#4 Jose 2009-04-0913:47:34 Pako me alegra que tengas por tradición venir de Jaén a ver esta emocionante procesion. Personalmente el tema de la megafonia me parecio fuera de lugar, era como una forma de resaltar por encima del resto y dejar a un lado lo tradicional, pero no dejes de venir por ese motivo, no vale la pena que por ese aspecto dejes de vivir el resto, que son únicos. Saludos
#3 Canastilla 2009-04-0913:44:09 Un año más, la Hermandad del Rosario ha dejado a Granada con la boca abierta. Así da gusto vivir la Semana Santa en Granada!!!Me voy a dar el gustazo de transmitiros un sueño: Desearía ver a la Hermandad de los Gitanos saliendo de la Abadía del Sacromonte, con un cortejo muy amplio y bien formado (como pudimos contemplar en el Rosario), acompañada por gitanos y payos, con un auténtico sentir cofrade, dejando a un lado el folklore que malbarata a nuestra Semana Santa y haciendo una Estación de Penitencia como Dios manda, concluyendo en el Sagrado Corazón de Jesús. Perdonadme todos aquellos amantes de la fiesta flamenca que se vive actualmente en el regreso de la Hermandad a la Abadía, pero eso, desde mi punto de vista, es algo ajeno al sentir de los cofrades.
#2 Pako 2009-04-0913:35:28 Soy un jiennense que hacia dos años no visitaba el Sacromonte la noche del Cristo de los Gitanos, algo que siempre me ha gustado hacer y recomendar a todos mis paisanos. Ayer sufri una gran decepción. Al llegar la comitiva al ensanche donde esta la Peña del Gallo (no se como se llama) hubo lo que en mi opinión fue una trifulca entre dos grupos de cantaores: uno de ellos los que yo siempre habia visto, cantando saetas a capela con su hoguera y vengalas; y otro grupo con megafonia, guitarras y flamenco, en la terraza de la Peña del Gallo. Alli no se escuchaba a unos ni a otros. ¿Que paso alli?. Menos mal que nadie venia con nosotros como otros años, por me hubiese dado verguenza ajena. Con lo bien que hemos hablado a todo el mundo de este momento especial y por nosotros vividos anteriormente. Igua me equivoco, pero me parecio un espectaculo lamentable el ofrecido y de momento tengo una cosa muy clara, el próximo año me quedare en mi Jaén, o eligire otro lugar nuevo por conocer.
#1 León de la Metro 2009-04-0912:52:29 Lo mejor de la noticia la galería fotográfica del Rosario… de 64 fotos, casi 60 son de la gente que había en la plaza de Santo Domingo. Está claro que era lo importante para el fotógrafo: que la plaza estaba llena…Por cierto, ¿sabía el fotógrafo que salía el Tres Caídas y la Virgen del Rosario?
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